La emancipación en España: La difícil situación a la que se enfrenta la generación z
Los jóvenes en España afrontan una delicada situación de emancipación por diversos motivos entre los que se encuentran bajos sueldos, trabajos inestables o altos costos de las viviendas. Todo ello hace que se convierta en una tema de gran interés social y económico y más si se compara con la mayoría de países europeos, destacando la tardanza y las barreras que impiden a la juventud alcanzar una vida independiente a una temprana edad en comparación con estos.
La edad media de emancipación de los jóvenes en España supera los 30 años, superando así casi cuatro años la media europea con 26,4 años según cifras de Eurostat de 2022. Este retraso a la hora de emanciparse del hogar es debido a varios factores entre los cuales el más significativo es la precariedad laboral. La mayoría de jóvenes españoles intercalan trabajos temporales y con sueldos bajos, lo que dificulta mucho a la hora de ahorrar la cantidad de dinero suficiente para poder independizarse. El Salario Mínimo Interprofesional es en 2024 de 1.134 euros, una cifra que a pesar de haber subido respecto años anteriores sigue siendo baja respecto al precio del alquiler que oscila los 900 euros mensuales. Por ello, les es imposible realizar una vida independiente sin la necesidad de tener que recurrir a compartir vivienda con otras personas o recibiendo ayudas económicas de las familias.
Aparte de los problemas con el precio de los alquileres y los salarios está el del paro juvenil, el cual la tasa de este en España es una de las más altas de toda Europa. En comunidades como Extremadura o Andalucía supera el 30% lo que hace que empeore aún más los números a nivel nacional.
- La edad media de emancipación en Suecia, Finlandia y Dinamarca es casi 10 años más baja que la de España
La situación en España es bastante diferente a la de otros países europeos, en la que países del norte del continente como Suecia, Finlandia y Dinamarca presentan una edad media de emancipación entre los 20 y 22 años que son casi 10 años más baja que la española. Uno de los causantes de que la edad de emancipación en estos países sea tan baja en comparación es gracias a las políticas efectivas que tienen implantadas que facilitan la independencia de los jóvenes. Algunas de estas políticas son el acceso a viviendas públicas y alquileres con un alto grado de asequibilidad, aparte de sistemas de apoyo financiero con una base bien estructurada para todo aquel que se quiera independizar. La combinación de políticas de vivienda accesibles y un mercado laboral favorable para los jóvenes han sido de vital importancia para otros países nórdicos, como Suecia, Finlandia o Dinamarca.
Diferencia entre algunos países europeos del sur y del centro con menor y mayor tasa de desempleo juvenil de los últimos 10 años / Fuente: Eurostat
La entrada de la vivienda
El acceso a la vivienda es otro gran obstáculo para la emancipación. ya que en España los precios de las viviendas han aumentado constantemente, tanto para comprar como para alquilar. El precio de entrada de una vivienda en España depende del precio final de esta, pero suele ser el 20% del precio final de la propiedad, lo que lo convierte en una cantidad bastante elevada e inalcanzable para la mayoría de jóvenes. También en el mercado de alquiler no existe esta barrera inicial, pero sí otras como comisiones, fianzas y altos costes mensuales que elevan el precio exponencialmente.
- Se destinarán unos 2.500 millones de euros a 50 mil jóvenes que deberán de tener menos de 35 años y cuyo salario sea inferior a 35 mil euros anuales
El Gobierno este año aprobó en el Consejo de Ministros una ayuda para los jóvenes españoles para la compra de una vivienda. Se destinarán unos 2.500 millones de euros a 50 mil jóvenes que deberán de tener menos de 35 años y cuyo salario sea inferior a 35 mil euros anuales. El dinero cubrirá el 20% que corresponde a la cantidad monetaria de la entrada que se paga al comprar un piso y es uno de los principales motivos por el cual los jóvenes no pueden adquirir un domicilio.
Con esta ayuda muchos jóvenes podrán tener más accesible la capacidad de emanciparse. A pesar de la gran ayuda que va a realizar el Gobierno a todos ellos, muchos no podrán hacerse con ella por algunos requisitos como la edad y el salario que pueden acarrear controversia.
El principal motivo por el que la juventud no se emancipa es por la entrada que piden a pagar por un piso, que resulta demasiado alta para aquellos jóvenes que o no tienen un trabajo estable o el salario no es lo suficientemente alto para ello. Gracias a esta ayuda este pago inicial ya no se deberá realizar y a la hora de pagar el piso mes a mes será más económico por el hecho de que los intereses serán más bajos por la disminución notable del precio de la vivienda.
Cantabria vive una situación parecida a la del resto del país, pero con algunas variantes significativas. La comunidad se encuentra entre las regiones con menor tasa de desempleo juvenil, pero a pesar de ello ha sido de poca ayuda para contrarrestar los problemas de emancipación. La precariedad laboral y los altos precios de las viviendas afectan también a los jóvenes cántabros que deben de depositar la mayor parte de sus ingresos a los alquileres, lo que minimiza su capacidad de ahorro y la remota posibilidad de poder comprar una vivienda en un futuro. Todo ello obliga a muchos jóvenes españoles a permanecer en sus hogares familiares mucho más tiempo de lo que desearían.
- Javier Corada: «Ha sido uno de los retos más grandes de mi vida»
«Ha sido uno de los retos más grandes de mi vida». Javier Corada, jóven de 25 años, trató su experiencia y el proceso que vivió hasta conseguir independizarse con su novia. Javier que llevaba 2 años buscando alquilar un piso con su pareja, contemplaba cada vez más la idea como una misión imposible, debido a los altos precios y a la cantidad de documentos y denegaciones que le hacían en el Registro de Propiedad, a pesar de tener un trabajo y sueldo estable tanto él como su novia.
Finalmente, a principios de este año encontraron un piso en Muriedas, cuyo alquiler no era desproporcionado y que con sus salarios podían asumirlo. Los primeros meses fueron difíciles, pero los pudo sobrepasar cuando pensaba en todo lo que había costado llegar ahí. «Emanciparme me ha enseñado a ser más responsable y a valorar cada euro que gano», dijo Javier, que habló también de los jóvenes que pasan por la misma situación que tuvo que vivir él durante 2 años, y declara que sabe que todos los jóvenes no tienen su misma suerte y espera que en un futuro no muy lejano haya más apoyo y oportunidades.
Por otro parte, está la situación que vive Cristian, jóven de 23 años que está en el mismo punto que la mayoría de jóvenes españoles al no poder independizarse por motivos fuera de su alcance. «La mayoría de las ofertas que recibo son contratos temporales o empleos a tiempo parcial que no ofrecen la seguridad económica necesaria para independizarse», desde hace 2 años está en el mercado laboral, pero siempre en trabajo inestables o con sueldos muy bajos. Su sueño es conseguir un trabajo estable y en unos años poder emanciparse y vivir con su pareja.
Además, Cristian habló sobre el apoyo que recibe de sus padres que le ayudan en todo lo que pueden, a pesar de que ellos también tienen sus propios gastos y preocupaciones. La frustración con la que vive es grande y muchas veces se arrepiente de no haber estudiado más para poder tener más oportunidades en el mundo laboral. «Vivir con mis padres a esta edad puede ser frustrante, ya que siento que es el momento de tener mi propia independencia y espacio personal». Aparte de su experiencia propia, ver a algunos amigos suyos que viven en otros países europeos ya estar independizados le hace sentirse más estancado.La situación afecta mi autoestima y mi sensación de autonomía. «Siento que mi situación es muy común hoy en día y eso es muy preocupante para el país, ya que la juventud somos el futuro», afirmó.
Posibles soluciones
Para mejorar la situación de emancipación de los jóvenes en España, es necesario implementar una serie de políticas y medidas que aborden los principales obstáculos que enfrentan. Estas políticas deben centrarse en mejorar el acceso a la vivienda, aumentar la estabilidad laboral y proporcionar un apoyo financiero más significativo a los jóvenes.
El Gobierno debe seguir el modelo de otros países europeos que están en situaciones bastantes más favorables. Un caso es el de Suecia, que invierte en la construcción de viviendas destinadas a alquileres con un alto grado de accesibilidad para los jóvenes. Por otra parte, es importante también controlar los aumentos desmedidos de los precios de los alquileres, así como también las prácticas abusivas que puedan practicar los propietarios de las viviendas sobre sus inquilinos.
En el aspecto laboral, disminuir la precariedad y aumentar la estabilidad en el empleo juvenil es fundamental. Esto se puede lograr a través de contratos con mayor estabilidad y con menos temporalidad. La formación profesional facilitaría la introducción de los jóvenes en el mercado laboral, adquiriendo habilidades técnicas con gran demanda y por ello obteniendo más opciones para ser contratado.
Por último, inyecciones económicas directas a los jóvenes es de igual o mayor importancia que lo anteriormente mencionado. Esto incluye la ampliación y mejora del Bono Alquiler Joven, subsidios y ayudas que cubran gastos iniciales, como los avales ICO. Programas y cursos que enseñen a los jóvenes a como ahorrar de la manera más óptima posible es otra opción que puede ser de gran ayuda.